jueves, 22 de abril de 2010

El unificador de mundos. Gwibber.


El unificador de mundos.
Gwibber.

Hubo alguna vez un mundo que me fascinó, llamado blog, pero del cual me he ido privando lentamente con el fin de darle más espacio a otras cosas. He recorrido cibernéticos caminos, encontrando nuevas instancias que no me aportan ni un ápice de lo que me aporta este medio, sin embargo, para algunos esos nuevos lugares se han tornado tan esenciales, que ya casi es imposible contactarlos en otro lugar que no sea allí.

Sin pretenderlo, cuando ya me estaba comenzando a cansar de visitar Facebook, Twitter, MSN e ICQ, más cuanto otro medio existe, me llegó un regalito del cielo que por fin me permitió unificar todo, sin siquiera tener que iniciar sesión. Basta que yo escriba algo en un recuadro, y esto se publicará en todos los medios que he registrado, dejando a todo el mundo contento.

Por tanto, doy gracias a quienes decidieron integrar Gwibber a la versión 10.04 de Ubuntu.

4 comentarios:

  1. WHAT!!!!! publicaste en tu blog! que milagro...
    Alguien dijo "y como vamos por casa?"

    Ahora respecto al tema que nos convoca. Lo que para ti es Gwibber para mí es TweetDeck (versión "windowsera"). Aunque sólo une Myspace (no usado en chile), linkedin, twitter y facebook.

    A mi el que más me cansa es Facebook. Pero me río muchísimo con Twitter, además de informarme.

    Pero la plataforma que se robó mi corazón es el blog. Es insustituible. Estoy enamorado y no tiene remedio este amor indescriptible.

    ResponderBorrar
  2. Sebastián: Si, tú y yo estamos apegados a los blogs.

    Daniel Alberto Silanes Puentes retomando viejas costumbres.

    ResponderBorrar
  3. Señor mio!! Esto es un milagro usted publicando!! hace una eternidad que no lo hacía jeje pero como siempre un placer leerlo!!

    Saludos!!

    PD: espero se acuerde de mi xD

    ResponderBorrar
  4. Soy la que no buscas: Por supuesto que sé quien es usted, y me trae tan gratos recuerdos como los que yo le doy a usted.

    Daniel Alberto Silanes Puentes en una noche fría.

    ResponderBorrar